viernes, 31 de marzo de 2017

BIENVENIDA



Vendió todas las letras del abecedario
Porque no le quedaban ideas.
Y tan enfrascado estaba en su búsqueda
Que se le desparramaron los números por el suelo.

Del viejo árbol aún pendían algunas ilusiones:
La esperanza, la alegría, la expectación…
Preludio de lo que estaba por venir.
Y, como no tenía letras, anunció la llegada de su amada
Con los números que pudo recuperar:

1,2,3… ¡Bienvenida, primavera!

Entonces… el semblante se le llenó de flores
y las ideas volvieron a brotar en su alma.

Bienvenida, por siempre.