martes, 15 de marzo de 2016

LO SABEN MIS ZAPATOS



Hoy he dicho a mis zapatos que no tengo fuerzas para correr. También  he dicho a los ingratos que no les voy a pedir nada. Prefiero que sea la vida y sus gentes quienes me sorprendan. Que me llegue cada cosa en su momento preciso y cuando me encuentre débil y crea morir que, al menos, una persona en este mundo me quiera “matar” de amor. “Quiero  que me abras, quiero tus palabras y quiero que lo quieras hoy".

Para mi esta canción reivindica el derecho que todos tenemos a tener días malos, regulares y peores. Días de esos en los que te duele tanto el cuerpo o el alma que sólo quieres que alguien te inunde de amor. Días en los que no quieres pelear porque, quizás, necesites coger fuerzas…

Al fin y al cabo venimos a esta vida para ser queridos y querer….

Hasta mis zapatos saben que esta canción me mata de amor, Pablo López. Gracias.


martes, 8 de marzo de 2016

LUNA CRECIENTE



LO QUE HIZO TOMAR LA DECISION DE NO VOLVER… desde la otra orilla veía las cosas con más perspectiva, aunque la orilla de enfrente siempre tendía a resquebrajarle el alma un poquito más cada vez. Arañazo a arañazo, iba absorbiéndole la vida. Jugándose el alma en cada embestida. Enjugándose cada herida en cada otoño de hojas secas. Esas mismas sobre las que caía cuando no le quedaban uñas para asirse a la vida.

La iluminaria, alumbraba hoy  su partida. Su liberación. Su paz infinita. Y ella, como una niña que sigue creyendo que todo es posible, iba más allá… apuntando su mirada hacia la luna, la cual la acogía en su regazo y la mecía en cuarto creciente.  Y es que, en verdad estaba creciendo a cada paso que daba. Desde el día en el que decidió cruzar ese puente plantándole cara al más letal invierno.

Ahí estaba su recompensa. Esa noche, con más luz que ninguna, refugiada en la luna… observaba como se acercaba la primavera. Ya nada le arañaba la piel. Desde su cénit, sentía como las flores la acariciaban.